Tessa West, la profesora asociada a Psicología de la Universidad de Nueva York, describe a los vampiros energéticos como “personas agotadoras, porque cada vez que interactúas con ellas es una experiencia estresante”.
La experta explica que este tipo de personas suelen absorber la fuerza vital y dejar emocionalmente agotados a aquellos que tienen cerca, en específico, a los que son más introvertidos.
Además, según le contó esta experta a CNN, algunos “síntomas” para detectar a estos vampiros energéticos se centran en los sentimientos de incertidumbre y aprehensión.
Incluso, especificó que, “si puedes sentir tu ritmo cardíaco y las palmas de tus manos sudar (al estar cerca de los vampiros energéticos), significa que estás en una situación muy difícil, porque la mayoría de las veces las respuestas al estrés no son perceptibles”.
Se deben poner límites en el tiempo que se comparte con el vampiro energético.
Los vampiros energéticos no suelen tolerar a las personas muy optimistas o felices.
Establecer distanciamiento físico y mantener una postura relajada que indique seguridad.
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