Este jueves se conoció que el juez federal de Morón Néstor Barral llamó a juicio oral a María Isabel Santos Caballero (Victoria Henao), la esposa de Pablo Escobar, a su hijo Sebastián Marroquín (Juan Pablo), al exfutbolista de Atlético Nacional y Boca Juniors, entre otros, y a otro número de ciudadanos argentinos.
Todos son señalados de blanqueo de capitales para un confeso narcotraficante preso en Estados Unidos identificado como José Bayron Piedrahíta.
Según dieron a conocer algunos medios gauchos, el proceso inició en 2016 cuando la DEA alertó al gobierno argentino de una organización delincuencial dedicada al lavado de dinero integrada por nueve personas, entre ellos los tres colombianos y el abogado y empresario Mateo Corvo Dolce.
Hasta Estados Unidos viajó un grupo de fiscales argentinos para entrevistar a Piedrahíta, quien relató cómo se lavó dinero de la Oficina, la agrupación criminal que ha desatado guerras delincuenciales por rentas ilegales en Medellín y otras partes de Colombia.
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El hombre confesó, según la justicia argentina, que mantuvo relaciones delincuenciales con alias ‘Rogelio’, el fiscal colombiano que luego de ser un aliado de la mafia se entregó a los estados Unidos.
Piedrahíta, que se declaró enemigo de Pablo Escobar en los 90 y manifestó que el capo le asesinó a dos de sus hermanos, señaló a Mauricio ‘Chicho’ Serna de ser un testaferro de ‘Rogelio’, algo que el exfutbolista niega.
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El papel de la esposa de Escobar y de su hijo habría sido para mediar en el negocio de propiedades del ‘Chicho’ Serna en argentina con el abogado Corvo Dolce.
Ninguno se ha pronunciado al respecto.