Aunque la Fiscalía dice tener interceptaciones que vinculan a los 14 policías y dos civiles con la red ilegal de hidrocarburos, los detenidos no aceptaron los cargos.
En el proceso, llevado a cabo el Palacio de Justicia de Valledupar, se contemplan cargos por concierto para delinquir, favorecimiento al contrabando de hidrocarburos y cohecho.
Durante la audiencia de imputación de cargos, el ente acusador aseguró que los detenidos recibían sobornos de contrabandistas de gasolina para que se les permitiera el paso por el puesto de control en límites de Cesar y Norte de Santander.
"Algunos particulares podrían estar como intermediaros para la entrega de Dádivas a los funcionarios policiales, con el fin de que se omitan los controles y se encontrarían algunos residentes del municipio de Río de Oro, Cesar, desempeñando esa función", sostuvo Leonor Merchán Lopera, fiscal segunda de la Unidad de Investigaciones Financieras.
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Entre las pruebas de la Fiscalía está la información entregada por un agente encubierto, encargado para destapar el vínculo entre los uniformados y los contrabandistas de combustible provenientes de Venezuela.
Las autoridades presumen que el pago de sobornos a estos oficiales activos de la Policía rondaría los 9 mil 300 millones de pesos.
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