Este era Cristian Camilo Maquilon Martínez, un antioqueño de 20 años que quería ser oficial de la policía y así poder regalarle una casa propia a su papá.
La última persona de su familia con la que habló fue con Katherine Rodríguez Maquilon, una de sus primas. “No salga tanto, pórtese juiciosa”, fue lo que le dijo por teléfono.
Su familia, sumida en el desconsuelo por la pérdida, lo recuerda como una persona muy familiar.
“Compatía mucho con nosotros, lo vimos crecer, era muy apegado a nosotros, tenía muchos sueños por realizar”, dijo su hermana.
A Cristian Camilo le gustó siempre el futbol, pero desde hace cuatro años se había dedicado al lanzamiento de disco. “Era muy disciplinado, alegre”, recuerda sobre él otra atleta.
De hecho se ganó una beca en las Escuela de Cadetes General Santander y empeñado en cumplir sus sueños salió de su casa en Chigorodó, un municipio del Urabá antioqueño, a cumplir sus sueños, el anhelo de ser policía,
También el que más lo movía: regalarle una casa propia a su papá, don Urbano Maquilon.
Cristian Camilo era el menor de 10 hijos, era el niño de la casa.
Updated: enero 20, 2019 12:50 p. m.