La mayoría de familias durmieron fuera por miedo a que el edificio, ubicado en la localidad de Bosa, siguiera cediendo.
El hecho ocurrió en horas de la noche, justo cuando los residentes de la torre de 15 pisos se disponían a descansar.
Otros de los afectados se negaron a pasar la noche en sus viviendas por las fallas de construcción.