Que ahora son más los habitantes de la calle en comparación con un par de años atrás, es la impresión que se llevan los transeúntes de la ciudad, sobre todo aquellos que caminan por el Centro, principalmente por la Avenida Oriental y La Playa.
“Se ven acostados en los rincones, durmiendo o esculcando en la basura. Y este número se multiplica después de las 8:00 de la noche. Por ejemplo, en la entrada de Comfenalco de La Playa, se acuestan a dormir hasta cinco personas”, afirma Elena Meneses, habitante del sector, quien añadió que a lo largo del viaducto del Metro el número se “hace impresionante”.
Este panorama es visible también en sectores como San Juan, La 70, Colombia y La 80.
El consumo de drogas es un común denominador entre esta población. Según reporta un estudio de la Secretaría de Inclusión Social, al menos 98 por cientos de las personas de la calle tiene algún tipo de vicio, siendo el más común el basuco.
Sin embargo, según Héctor Fabián Betancur Montoya, secretario de Inclusión Social y Familia, en el 2009 fueron contabilizados 3.381 habitantes de calle, mientras que en un censo de enero de 2014 fueron identificados 3.225 personas.
Esta leve estabilidad en el número de habitantes de la calle se debe, según Héctor Fabián Betancur, a los fuertes programas que se impulsan desde la Alcaldía, con la atención a estas personas a través del Sistema de Atención al Habitante de Calle Adulto, que son centros ubicados en varios puntos de la ciudad.
Este Sistema de Atención tiene como fin último rehabilitar a estas personas y reintegrarlas a proyectos productivos.
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¿Entonces por qué se ven más habitantes de calle? Esto se debe, según explica el funcionario, a la ofensiva que el año pasado hizo la Policía, por orden del presidente Juan Manuel Santos, en contra de las llamadas ‘ollas de vicio’. En estos lugares la gente no solo iba a adquirir alucinógenos sino también a consumirlos.
En septiembre del 2013, la Policía había desmantelado 45 ‘ollas de vicio’, la mayoría de ellas ubicadas en el sector conocido como Barbacoas y la Avenida de Greiff, en el Centro de la ciudad. Allí se evidenció que había casas que hospedaban hasta 30 consumidores de droga.
Con la destrucción de estos lugares, los habitantes de calle se trasladaron casi permanentemente a las vías de la ciudad. “Con el cierre de estas plazas estas personas están más visibles al resto de la comunidad. Se concentraron en la Avenida de Greiff, y en la vera del río, en proximidades sobre todo al barrio Moravia donde hay una concentración de unas 500 personas”, afirmó.
Anualmente la alcaldía invierte poco más de 7 mil 500 millones de pesos en la atención integral a las personas en condición de calle. Y diariamente, en diferentes puntos, atiende unas 1.500. Allí reciben alimentación, baño y son revisadas por médicos y rehabilitadores.
En estos lugares las personas tienen la oportunidad de resocializarse con talleres de carpintería, mecánica de motos, ornato y embellecimiento.
“Pero la mayor barrera que tenemos para reintegrar personas a la vida social es que ellos deben tomar la decisión personal del cambio, y en esto estamos trabajando fuertemente; por ello en los últimos años no hemos tenido aumento en el número de habitantes de la calle”, concluye el funcionario.
Updated: enero 29, 2015 06:18 a. m.