La joven de 18 años trabajaba sin recibir un salario y no se le permitía salir de la casa ni tener contacto con su familia.
El juez 16 penal del circuito condenó a Claudia Maritza Castilblanco a 13 años de prisión por los cargos de trata de personas. Según determinó la justicia, esta tenía como empleada doméstica a una mujer indígena sin pagarle salario y reteniéndola contra su voluntad.
“Atendió labores domésticas durante horas que sobrepasaban la jornada laboral permitida, debía realizar oficios extenuantes, no tuvo descanso, su libertad fue limitada por cuanto no podía salir de casa y la dejaban bajo llave cuando estaba sola”, declaró la juez.
Dentro de las investigaciones se reveló que Castiblanco le había prometido a su víctima un pago de 250.000 pesos mensuales, cifra muy inferior al salario mínimo de la época, pero ni siquiera se lo dio.
Para colmo de males, la juez contó que la empleadora tuvo el descaro de cobrarle a la joven miembro de la etnia carapana un plato que rompió mientras hacía labores de aseo: La ciudadana Claudia Maritza Castiblanco Parra le manifestó que se lo descontaría de su salario y que este valía 5 millones de pesos, es decir tendría que laborar durante 20 meses para pagar el valor de la pieza decorativa.
Updated: septiembre 20, 2018 08:22 a. m.