Aunque muchos trabajadores sienten un respiro porque volverán a recibir su salario, no esconden su temor por el peligro al que están expuestos al salir de casa.
El puesto de trabajo de Martha Patricia Guzmán lleva desocupado desde el pasado 20 de marzo, pero este lunes por fin nuevamente será ocupado.
“Yo trabajo en Marroquinera SAS hace 31 años, trabajo en el área de ingeniería, soy la líder del grupo”, contó la operaria.
Desde el sábado ha estado alistando todos los implementos de seguridad para regresar a su empresa, pero entre tanta emoción también aseguró tener un poco de temor por un posible contagio.
Publicidad
“Sí claro, si me afana volver, pero pues con todos los elementos de protección y lo que nos han dicho en la empresa: el riesgo puede ser mínimo, ya va en uno el autocuidado al estar fuera en la calle”, manifestó Martha.
Y sin importar el riesgo al que esté expuesta, ya tomó sus propias medidas en materia de movilidad.
Publicidad
“Vamos a intentar viajar en bicicleta, la idea es utilizar lo menos posible el sistema de transporte masivo entonces vamos a intentar a ver cómo nos va”, explicó la operaria de marroquinería.
Hay tanta ansiedad en ella y en sus compañeros al saber que vuelven a trabajar que mediante videollamada comparten consejos para salir con todas las de la ley:
“No se les olvide los implementos de seguridad, primero la vida, guantes, tapabocas y alcohol. Nos vemos el lunes a ver cómo iniciamos labores”, les dijo a sus colegas.
Dentro de poco, Patricia volverá a fabricar bolsos, cinturones y billeteras, de 6:00 de la mañana a 4:00 de la tarde. Su empresa ya tomó la decisión de separar con un metro y medio de distancia cada puesto de trabajo para proteger a sus empleados.
Publicidad
Además de las manufacturas, solo faltan unas horas para que el sector de la construcción retome sus actividades, varias empresas se prepararon para recibir bajo los protocolos de protección a sus empleados, algunas de estas van a iniciar una etapa de capacitación y posteriormente continuarán con sus proyectos.
Fredy Enrique Santiago ya tiene listo su uniforme. Después de más de un mes de incertidumbre lo llamaron de la constructora en la que trabaja y aunque fue una decisión difícil retomará sus labores.
Publicidad
"Me da miedo salir a la calle, pero tengo que trabajar", confesó el maestro de obra.
“Le da uno miedo salir a la calle porque el contagio puede ser tremendo, pero las necesidades lo obligan a salir a trabajar porque no da espera la comida, pagar servicios, que el arriendo…”, añadió el empleado del sector de la construcción.
Fredy es maestro de obra en un proyecto de vivienda de 25 pisos, pero por la cuarentena las maquinas se apagaron y el material se guardó.
“Nos pararon el 20 de marzo hasta que el Gobierno Nacional diera todos los protocolos para seguir adelante con el proyecto”, recordó el trabajador.
Publicidad
El anuncio llegó y el presidente Duque anunció que las obras de construcción se pueden reactivar, pero con la noticia también vinieron cambios en la forma de trabajo.
“Se le está dando entrada a diferentes horas para que se mantenga el distanciamiento entre ellos, también, a la hora del almuerzo manteniendo las distancias recomendadas. Además, tenemos unos lavamanos y se les va a entregar un kit, la idea es que cada tres horas ellos se laven las manos”, explicó Diana Fajardo, gerente de la construcción.
Publicidad
Fredy también quiere tomar sus propias medidas, dice que va a comprar una bicicleta para desplazarse y comenzará la rutina de limpieza cuando llegue a casa.
“Cuando lleguemos de la calle quitarnos los zapatos, la ropa dejarla afuera del apartamento y bañarnos para prevenir cualquier riesgo que traigamos de la calle”, describió el empleado del sector de la construcción.
Los directivos de la obra esperan que la jornada de capacitación para los empleados dure tres semanas y luego continuarán con la construcción en su totalidad.
Publicidad