Aunque miles están esperando una oportunidad de vida, potenciales donantes se muestran reacios debido a falsas creencias.
Un estudio de Invamer reveló cuáles son las principales.
1. No es cierto que para ser donante deba inscribirse previamente. La ley 1805 de 2017 convirtió a todos los colombianos en potenciales donantes, salvo a quienes formalicen su voluntad de no serlo.
2. Es falso que ser donante lo convierta en blanco del tráfico de órganos. El proceso es vigilado por Minsalud, el Instituto Nacional de Salud y otras entidades estatales autorizadas.
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3.Se trata de un proceso de alta complejidad que exige personal experto, lo mismo que la conservación y transporte de los órganos donados.
4.Tampoco es verdad que las religiones prohíben esta práctica. Muchas la aprueban y otras la dejan en manos de sus fieles.
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5. Es mentira que solo personas con dinero se benefician de la donación de órganos. La selección de beneficiarios tiene que ver con la compatibilidad entre donante y paciente, y con la urgencia del trasplante.