Industria de la salsa caleña está en quiebra por emergencia del coronavirus COVID-19

Los grupos de bailarines han cancelado sus presentaciones y cerrado sus escuelas.

Durante la cuarentena la ‘Capital Mundial de la Salsa’ no pasa por su mejor momento. Con el cierre de los eventos masivos, las escuelas, shows y bailarines están sin recursos para sobrevivir.

“Dejamos de realizar aproximadamente unos 6 espectáculos al mes, eso, por fuera de todos los viajes que han sido cancelados. Una de las cosas más preocupantes es que seremos los últimos en volver a retomar labores. Se ha hablado hasta de 18 meses sin eventos que aglutinen a más de 500 personas”, expresó Blanca Granados, directora de Ensálsate.

Quienes llevan en el alma los pasos, ritmos y creatividad aseguran que el Estado los ha abandonado. Dicen que al arte no lo han tenido en cuenta dentro de los efectos del aislamiento.

Algunos se las ingenian y ya acuden a la tecnología para intentar difundir sus conocimientos y que no se les baje el telón en esta situación.

“Se trata de movernos completamente en lo digital, así que vamos a continuar con nuestra formación artística y nuestras clases de baile”, manifestó Viviana Vargas, directora de la Fundación Estilo y Sabor.

Las escuelas de salsa, que son el principal semillero de talentos, hoy por hoy no tienen cómo solventar sus gastos de operación.

“Todo el vehículo social que representan los procesos de formación que hacemos nosotros con comunidades menos favorecidas, todos estos jóvenes que a través de la danza encuentran una oportunidad de vivir, de soñar, de trabajar, porque nosotros somos los que proveemos bailarines a los principales espectáculos de la ciudad”, dijo Edwin Chica, director de Salsa Viva.