Su iniciativa, llamada expedición Wakirá, llegó a Filandia en Quindío. Sin cobrar un solo peso, así prestaron su servicio de medicina a domicilio.
Jader Antonio Soto y Claudia González, quienes encabezan esta noble aventura, anhelan que su trabajo se convierta en un movimiento en el que profesionales de la salud y otras materias aporten su conocimiento a los más necesitados.