La expectativa para dicho encuentro, que se disputará sobre las 3:30 p.m., ha hecho que la Policía disponga de un total de 2.500 hombres en la ciudad de Barranquilla.
“Brindamos seguridad para los entrenamientos, desplazamientos de los equipos y todo lo que implica la realización de este partido. Para el juego, la Policía instalará tres anillos de seguridad”, aseguró el Coronel Harold Barrera, jefe del servicio de seguridad para el estadio.
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Se tiene estimado que al estadio Metropolitano llegarán un total de 500 hinchas chilenos, quienes, para garantizar su integridad, tendrán el acompañamiento de las autoridades en las graderías.
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“El llamado a las personas es a que lleguen al escenario deportivo en transporte público, que lleven ropa ligera y se abstengan de llevar cinturones y sombrillas”, advirtió el Coronel Barrera.
Ya al interior del estadio, cerca de 600 personas de logística se encargarán de la organización y otras 100 serán dispuestas como auxiliares médicos. De ellos tan solo 20 prestarán atención a lo que ocurra en el campo de juego.