El centrocampista del Strømsgodset, que lógicamente lució el número 15, no sólo salió de titular y jugó los noventa minutos, sino que fue el mejor de su equipo, participó en todas las acciones de peligro y rozó el gol en una ocasión.
"Es técnicamente bueno como pocos y posee una comprensión del juego que impresiona", dijo de él su compañero el delantero Marcus Pedersen al término del encuentro.
La convocatoria le llegó a Ødegaard, al que sigue media Europa, apenas unos meses después de debutar con su equipo en Primera, batiendo otro récord nacional y donde en quince partidos dejo una excelente impresión y números notables: 3 goles y 6 asistencias.
Tras los años dorados de la década de 1990, que culminaron en la victoria frente a Brasil en Francia 98, Noruega vivió un descenso al abismo del fútbol europeo y hace 14 años que no juega una fase final de un gran torneo.
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De ahí que Ødegaard haya devuelto el optimismo, y varios medios reclamen que sea convocado para el partido de clasificación para la Eurocopa de dentro de dos semanas contra Italia.
"Prefiero cien veces a Ødegaard que a los veteranos en la selección", escribió en "Aftenposten" el ex entrenador y comentarista Lars Tjærnås, destacando su "extraordinario talento".
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Si el adolescente del Strømsgodset juega contra Italia sería el debutante más joven en la historia del fútbol europeo en un partido de clasificación, superando la anterior plusmarca por casi un año de diferencia.
"Pienso que hice un gran partido, luego será Per-Mathias (el seleccionador noruego) el que elija a los mejores", declaró Ødegaard, quien sorprende tanto por su talento como por su madurez.