Ocurrió en el fútbol asiático, aunque hay poca información de la insólita jugada.
La celebración del arquero porque el balón se estrelló en el palo contrastó con la frustración del cobrador, sin embargo, la pelota hizo un extraño efecto y terminó entrando en la portería sin que el guardameta, quien aún festejaba, pudiera reaccionar.
El penal más INSÓLITO de la historia pic.twitter.com/lwobYaqtrD
— 𝐀𝐧𝐝𝐫𝐞𝐬 𝐇𝐚𝐧𝐬𝐞𝐧 𝐕𝐢𝐤 (@JulioBarriga) October 22, 2017