"No sé. No sé ni si me operaron. Son cosas que no sabemos. No puedo decir", aseguró un Ronaldo de muy buen humor en una rueda de prensa que concedió en la sede del Corinthians para referirse a su proceso de recuperación tras la cirugía a que fue sometido el 29 de julio para la corrección de una fractura en la mano izquierda.
En esa época diferentes medios informaron que el ex jugador del Real Madrid y del Milán había aprovechado para someterse a una liposucción en la que le habrían retirado 700 mililitros de grasa localizada en los costados de la barriga.
La intervención nunca fue confirmada ni comentada por el Corinthians o por los asesores del goleador de la Copa del Mundo de 2002.
Según las versiones de prensa, el tres veces mejor futbolista del mundo, que ha sido protagonista de sucesivas polémicas por su exceso de peso, tenía estudiada la posibilidad de someterse a la operación de liposucción desde hacía semanas, pero la tenía planeada para diciembre, cuando concluye el Campeonato Brasileño.
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El jugador la habría anticipado para aprovechar que de cualquier forma tendría que pasar por el quirófano y que estará alejado de las canchas por casi dos meses debido a su fractura en la mano.
"Yo encaro con mucha tranquilidad (las preguntas sobre la liposucción) porque en mi vida siempre he sido así, un perseguido por ser quien soy", afirmó el atacante.
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"Inevitablemente soy noticia hasta cuando no juego, pero acepto todo de buena forma", agregó.
"Pero como yo dije en mi primera entrevista (como jugador del Corinthians), lo que yo hago en mi vida particular es problema mío", concluyó.