El lamentable estado de la cancha se dio luego del concierto que dio la banda británica Iron Maiden el pasado fin de semana y que ha obligado a los equipos que disputan los campeonatos de ese país a jugar en dichas circunstancias.
Sin embargo, y debido a la proximidad de las nuevas fechas de eliminatorias, las autoridades deportivas de esa región están preocupadas puesto que solo faltan 13 días para que se dispute el partido.
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El ingeniero Ernesto Riera, encargado de velar por el estado de la gramilla, declaró que una situación similar se presentó cuando Argentina enfrentó a Paraguay, pero se tuvo un mes para trabajar en el mejoramiento del césped.
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La preocupación ya se evidenció en la Asociación de Fútbol Argentino, AFA, ya que envió de manera inmediata dos máquinas de trabajo, una aireadora profunda y una cortadora vertical, que sirve para sacar el pasto muerto.
Por el momento se desconoce si los gauchos tratarán de cambiar de sede ante este suceso.