Fuentes cercanas indicaron que el proceso que debía finalizar este viernes, debió ser pospuesto con el visto bueno de los implicados.
"La parte china pidió posponer la firma un mes. Eso sería posible con el pago de una nueva transferencia de 100 millones de euros", indicó la fuente.
Silvio Berlusconi, presidente del equipo italiano desde 1986, dio su visto bueno al acuerdo en agosto de 2016 para vender el club por 740 millones de euros.
Según la prensa italiana, el grupo de empresarios chino, que ya ha desembolsado 200 millones de euros, se encuentra en dificultades financieras tras la retirada de uno de sus inversores.
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El diario ‘La Repubblica’ afirma que uno de ellos que debería aportar entre unos 80 y 100 millones de euros se retiró porque no ha conseguido obtener el permiso para mover su capital fuera de China.
"Parece una broma, una de esas que no te hace reír", comentó al diario deportivo ‘Gazzetta dello Sport’.
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El acuerdo sellado entre Fininvest, el holding de Silvio Berlusconi, y Sino-Europe Sports (SES), que representa a compradores chinos, supone el 99% de las partes del club lombardo por 740 millones de euros, de los cuales 220 millones son deuda.
En estos momentos, sólo faltan 320 millones de euros para que se concluya la compra.