Antes de empezar, expertos recomiendan evitar a toda costa estar tensionados, pues esto influirá negativamente en la interacción con el deseo receptivo de su pareja. De acuerdo con el consejero sexual clínico Eric M. Garrison, varias personas “necesitan comenzar el proceso de desestresarse antes de tener relaciones sexuales”.
Puede leer junto a su pareja un libro de literatura erótica, ver una película, realizar un masaje o escuchar cierto tipo de música que les permita entrar en un ambiente más romántico y con menos tensión.
La activista cannábica poliamorosa Tiana GlittersaurusRex, cofundadora de The Sex Work Survival Guide, recomienda que quien se encuentre abajo envuelva el torso de la pareja que se encuentra arriba con las piernas, pues esto permite que ambas partes se sientan más unidas.
Holly Richmond, terapeuta sexual certificada y psicóloga somática, mencionó en la revista Women’s Health que esta posición es “ideal para mantener el contacto visual y la proximidad”.
No solo Garrison lo recomienda para bajar los niveles de estrés, también la sexóloga y embajadora mundial de Womanizer, Jessica O’Reilly, mencionó que es una buena opción si se quiere ceder el control. La experta asegura que con esta posición creará “una experiencia tanto erótica como conectada”.
Con esta lograrán sentir placer mutuo y reconocer el lenguaje no verbal de su pareja. Al estar frente a frente, según Richmond, aprenderá a leer las señales somáticas de su amante y reconocer qué se siente o no bien para su par.
Richmond recalca que, en la mayoría de las ocasiones, “si las personas sienten que el sexo es íntimo, es porque existe una conexión”. Así que no importa cuáles posturas escojan con su pareja, mientras les permita ir más allá de lo sensorial podrán pasar una gran velada.
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