Savannah Blouin, una joven de 22 años que reside en Connecticut, lleva en su cuello un particular collar: en él están sus trompas de Falopio.
La mujer decidió someterse a una salpingectomía (cirugía para extirpar ambos ovarios y ambas trompas de Falopio) debido a que siempre supo que no quería tener hijos.
La joven le contó al medio NeedKnown que luego de la cirugía se sintió sumamente empoderada.
La primera se relaciona con el caso revocado contra Roe V. Wade en 1973, donde la Corte Suprema de los Estados Unidos dictaminó que la Constitución protege la libertad de una mujer que elige abortar.
Señaló que su progenitora no pudo conservar sus trompas de Falopio, así que quiso honrarla.
Fue a una tienda de manualidades con las trompas en un vaso de plástico y habló con un experto que tiene experiencia con el manejo de resina.
Moldearon las trompas de Falopio de Blouin en la resina y, gracias al resultado, consiguió un accesorio único.
“Estoy muy agradecida de haber podido realizarme este procedimiento e inspirar a otras personas a hacerse cargo de sus propios cuerpos de una manera similar”.
Haga clic aquí: