Sarah Bartlett, una mujer de 37 años, intentó convertirse en influenciadora y, sin importarle el precio, lo logró.

El precio que tuvo que pagar para lograr tener las “fotos perfectas” fue caro, tanto así que adquirió una deuda que llegó a los 14.540 dólares.

Según reportó el medio South West News Service, citado por El Comercio, en un período de 6 años, la mujer británica se endeudó con 8 tarjetas de crédito.

Sarah explicó en sus redes sociales que llegó a adquirir una gigantesca deuda gracias a que era “adicta” a las compras.

Su mayor deuda ocurrió en 2015, luego de que fue ascendida en su trabajo en recursos humanos. Aquel año utilizó una tarjeta de crédito para comprar un carro valorado en 13.000 dólares, lo cual la dejó sin ahorros.

“Saqué la tarjeta de crédito con una transferencia de dinero (13.324 dólares) y fueron a mi cuenta bancaria, que luego pagó el auto. Pagaba esa tarjeta con otra”, explicó.

Además, empezó a utilizar ropa de marca, compró el último celular en el mercado y asistía a restaurantes lujosos.

Aunque sabía que ya no tenía suficiente cantidad de dinero para intentar sostenerse, empezó a experimentar cierto “estatus” en Instagram, lo cual la impulsó a comprar más cosas.

Luego de darse cuenta de que no podía seguir manteniendo aquel estilo de vida, decidió buscar ayuda y, a su vez, brindarle consejos a sus seguidores para que aprendieran a administrar mejor el dinero.

Gracias a que logró recibir asesoramiento para resolver sus problemas financieros, ahora solo le debe al banco 908 dólares.

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