A inicios de 1828, un grupo de jóvenes se reunió para enterrar una cápsula del tiempo, en la cual se esperaba encontrar un poco de la historia de la Academia Militar de Estados Unidos, también conocida como West Point.
La caja fue encontrada hace unos meses en la base militar y se cree que fue colocada por cadetes que residían en ese sitio hace dos siglos.
Fue hallada mientras hacían renovaciones de la estatua de bronce de Tadeusz Kościuszko, un militar polaco que luchó en algunas revoluciones estadounidenses.
La academia militar hizo un evento para desvelar lo que había en la imponente caja.
Según informó el medio Los Angeles Times, la historiadora Jennifer Voigtschild empezó la presentación diciendo emocionada: “¿Estamos listos para ver qué hay allí?”.
Creyeron que en la caja de plomo encontrarían cubiertos, una bandera estadounidense, botas, diarios relatando lo vivido de la época, un anillo o mapas.
Pero se llevaron una gran sorpresa cuando intentaban “descubrir los secretos del pasado”.
“La caja no cumplió con las expectativas”, dijo el arqueólogo Paul Hudson, pues en el contenedor solo había piedras, barro, una sábana negra y una moneda de la época.
Se niegan a pensar que los soldados de la época se tomaron el tiempo y “la molestia” de poner la caja en el monumento y no colocar algo de valor en su interior.
Planean investigar el sello del fabricante de la caja para que los ayude a conocer el origen de esta.
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