Una mujer descubrió el cuerpo del niño, que había sido mordido por perros, y alertó a la Policía. La madre fue acusada de infanticidio.
La responsable del crimen "dio a luz y envolvió al bebé en su pijama" en una vivienda de la ciudad andina de Oruro el viernes pasado, según un reporte de la Fiscalía General del Estado de Bolivia.
"Pasados unos diez minutos, al ver que el recién nacido no lloraba ni se movía, lo dejó en una habitación", señala el reporte.
Al día siguiente lo metió en una bolsa negra y lo llevó a la esquina de su casa, donde lo botó a un basurero.
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Una mujer avisó a la Policía que había encontrado muerto al niño al pasar por el lugar, donde estaba "botado en el piso, cerca de un basurero", con múltiples heridas "causadas por mordedura de perros", de acuerdo con la Fiscalía.
"La Policía realizó una búsqueda exhaustiva por los domicilios cercanos al lugar donde se encontró el cuerpo del bebé y se logró dar con la madre, que aceptó que abandonó al recién nacido en el basurero", añade.
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Un juez de lo Penal decretó la detención preventiva de Sirley H.M., imputada por infanticidio, en el penal de La Merced de Oruro, después de que la autopsia realizada por el Instituto de Investigaciones Forenses revelara que la causa de la muerte fue "por hipotermia ante el abandono".
Este caso eleva a 21 los infanticidios registrados en lo que va de año en Bolivia, según datos de la Fiscalía.
Anteriormente se han reportado otros casos de bebés abandonados en la calle en Bolivia, algunos con la recuperación del niño y otros con desenlace trágico.
Los infanticidios generan una preocupación social en el país, donde el año pasado se contabilizaron 66 casos, según datos oficiales.
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