Gary Edmunds jamás imaginó que su amistad con una mujer que conoció en Facebook lo fuera a dejar en la bancarrota, tanto así que está a punto de perder su casa tras adquirir una deuda de más de 37.000 dólares.
El hombre británico, de 72 años, se unió a un grupo de Facebook para comprar una casa rodante y así irse de vacaciones con su esposa, quien padecía Alzheimer.
En aquella página, Abelie, una supuesta vendedora de un concesionario de carros Bentley, le compartió una información sobre un programa de inversión en bitcoins, pues así no solo Gary podría comprar la casa rodante, también “ahorrar muchos dólares”.
“Me puso en contacto con un financista llamado Máximo por WhatsApp, quien volvió a llamarme el día siguiente y me dio más detalles. Puse entre 2.500 y 3.700 dólares. Mis fondos comenzaron a crecer bastante”, contó el hombre, según el medio TN.
Al ver que había ganado una gran cantidad de dinero, quiso retirarlo, pero Máximo le informó que para obtener los dólares debía “depositar un 20% más del total” que tenía ahorrado.
Como pudo, Gary ahorró 100.000 dólares y solicitó un préstamo a un banco para poder retirar el dinero.
Le envió el dinero a Máximo y este le aseguró que le transferiría sus ganancias. Para la sorpresa de Gary, los dólares nunca llegaron.
Al indagar qué había pasado con la transferencia, Gary se dio cuenta de que Abelie y Máximo lo habían estafado.
“Estoy desesperado y en bancarrota. Cuando te engañan de esta manera te hace sentir muy estúpido. Una vez que caes es como estar en una trampa para ratas, no puedes salir de ella”, reveló.
Para su pesar, su esposa falleció, tuvo que pagar el funeral y nunca pudo cumplirle el sueño de viajar en una casa rodante.
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