La FDS detuvo la ofensiva en Baghuz para permitir la salida de los no combatientes y heridos. La situación es desesperante para estas madres.
Mujeres con niqab y bebés en brazos y hombres heridos con muletas continuaron evacuando el último reducto del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria, donde las fuerzas apoyadas por Estados Unidos esperaban este miércoles que culmine la salida para reanudar su ofensiva.
Los combatientes kurdos y árabes de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) habían reanudado el viernes su ofensiva en la localidad de Baghuz, pero tuvieron que interrumpirla ya que miles de mujeres y niños, así como numerosos heridos abandonaron el sector los últimos días. Los últimos yihadistas están allí acorralados.
El hambre y el terror de las bombas las ha traído hasta un corredor humanitario.
Abandonaron el califato y caminan por este corredor humanitario con la certeza de que a partir de este momento están completamente solas.
“Muchas familias no pueden salir por los constantes bombardeos, la situación es terrible”, dice una finlandesa que abandonó el Estado Islámico.
Esta joven llegó al Estado Islámico a los 8 años, sus padres la enviaron desde Finlandia. Hoy tiene 13 años, es madre y solo quiere regresar a su casa.
“No sé, no sé qué voy a hacer, solo quiero regresar a Finlandia”, dice.
Como ella hay miles que, con sus hijos en brazos, lograron esquivar las balas de quienes todavía se aferran al califato.
“Llegó una niña que había recibido un disparo en la cabeza, su cerebro estaba expuesto pero no podemos operarla aquí. La limpiamos, le pusimos vendas y nos la llevamos de aquí”, dice David Eubanks, quien brinda ayuda humanitaria a los niños.
En los últimos 2 días, 6 mil personas han escapado; son en su mayoría las esposas y los hijos de quienes manejaron el Estado Islámico.
Muchas mujeres son europeas, una de ellas es francesa y es viuda de uno de los responsables del atentado en París que dejó más de cien muertos.
“Yo no quiero regresar a Francia, el Estado francés uso sus armas para matar a mi esposo e hijo”, dice.
Los niños han sobrevivido a bombardeos y fuego cruzado. En este momento, combatir el hambre es su próximo desafío.
Muchos juegan entre la arena mientras sus padres, a unos kilómetros, esperan para ser interrogados.
Updated: marzo 06, 2019 05:00 p. m.