Calculan que en el lugar, que funcionaba como un supuesto taller de mecánica, se desvalijaron unos 50 vehículos.
El desguazadero, como se les conoce coloquialmente a esos sitios, estaba ubicado en el barrio San Pablo.
En el sitio había partes de automóviles de media y alta gama.
La Policía intenta identificar los carros y a quiénes pertenecían.