Según una investigación realizada por la Universidad Utrecht, cerca del 12% de las personas que suelen tomar bebidas alcohólicas padecen ansiedad durante la resaca.

A pesar de que no es muy común tener estos episodios, se conoce que luego de beber alcohol se incrementan los niveles de cortisol u hormona del estrés, la frecuencia cardiaca y la presión arterial, efectos similares a los que ocurren durante los episodios de ansiedad.

El término ‘hangxiety’ o ansiedad por resaca es relativamente nuevo. De acuerdo con Alcohol Rehab Help, las bebidas embriagantes alteran la endorfina, serotonina y dopamina, lo cual provoca “euforia” mientras se bebe, pero con el paso de las horas, estas bajan y pueden generar ansiedad o tristeza.

Incluso, el estudio de la Universidad de Oxford titulado ‘¿La resaca de alcohol afecta la capacidad de regulación de las emociones?’ demostró que la “reactividad emocional puede verse afectada negativamente”.

Falta de sueño y estrés: posibles factores detonadores durante la resaca

De acuerdo a CNN Health y Science Alert, las consecuencias mencionadas anteriormente provocan disminución en la memoria, pérdida de atención y bajo estado de ánimo.

¿Por qué algunos se sienten ansiosos y otros no?

Las investigaciones revelan que aquellos que suelen “catastrofizar el dolor” o exagerarlo, bien sea un malestar muscular o de cabeza, tienden a experimentar mayor inquietud y preocupación durante las resacas.

Los cambios de humor durante el guayabo

Estudios indican que aquellas personas que suelen sentir culpa, depresión o ira al beber, también pueden experimentar ansiedad durante la resaca, pues son más susceptibles a estos cambios de ánimo. De igual modo, expertos creen que quienes se identifican como “tímidos” no la pasan bien después de beber.

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