Sam Messina se encontraba cursando su tercer año universitario cuando padeció un hecho que le hizo replantear la vida.

Este joven de 26 años, oriundo del estado de Illinois, se mudó a Alabama para estudiar en una universidad.

Según reportó New York Times, en septiembre de 2016 se encontraba acostado en su cama y, de repente, estornudó.

“Cuando estornudé, básicamente tenía un aneurisma. Mi cerebro prácticamente explotó y el coágulo salió de mis fosas nasales. Además, me provocó un derrame cerebral, así que me desmayé. Debería estar muerto”,

comentó.

Mayo Clinic explica que una aneurisma cerebral es “una protuberancia o abombamiento en un vaso sanguíneo del cerebro. Puede presentar una pérdida o ruptura, y causar sangrado en el cerebro”.

Previo a su desmayo, Sam logró llamar a su mamá y novia para que lo auxiliaran y llevaran a un centro médico.

Allí, los doctores le informaron a la familia de Messina que él tenía una malformación arteriovenosa, lo que provocó “un enredo en los vasos sanguíneos que conectan las arterias y las venas del cerebro”. El estornudo, creen, pudo salvarle la vida.

Fue sometido a tres cirugías de emergencia para eliminar el coágulo

Tras recuperarse exitosamente, Messina se dedicó a grabar videos, lo que soñaba hacer en su vida. Ahora tiene una empresa de filmación.

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