Una mujer de 36 años tuvo un encuentro cercano con la muerte tras quedar parcialmente paralizada por aplicarse unas inyecciones de bótox en el rostro.

Por medio de su cuenta de Instagram, Alicia Hallock contó su travesía médica tras resultar teniendo raras complicaciones por unas inyecciones de bótox que se aplicó para tratar sus migrañas.

La mujer aseguró que la complicación le ha causado problemas en los músculos del cuello, caída de los párpados y disfagia. "Tengo que usar un collarín para ayudarme a mantener la cabeza erguida", destacó.

"Experimenté un par de días en los que me ahogaba con sorbos de agua e incluso con mi propia saliva. Me trasladaron a la UCI y me han metido 6 tubos por la garganta para subir toda la mucosidad que está atascada en mis pulmones y garganta", describió.

Los médicos debieron aplicarle un botulismo antitoxina para intentar revertir el efecto de las inyecciones. "La gente tiene complicaciones de bótox, incluso experimentando algunos o todos los síntomas que tengo. Sin embargo, es extremadamente raro tener numerosos síntomas en la gravedad o grado que tuve", comentó.

Alicia, quien desde hace tres años padece de una enfermedad pulmonar crónica, aseguró que esta experiencia con el bótox fue completamente aterradora, haciéndola temer por su vida.

"Pusieron un tubo y empezaron a alimentarme con medicamentos y nutrición a través del tubo de alimentación. Es absolutamente miserable, pero también ha sido muy útil. Esto ha sido horrible y aterrador, y completamente derrotador", describió.

En sus publicaciones ha mostrado cómo en las últimas semanas ha podido pasar de no poder moverse a comenzar a recuperar la fuerza en sus músculos.

Tras 18 días internada, la mujer fue dada de alta y volvió a casa con sus hijas. "Casi pierdo mi vida otra vez, pero de alguna manera, por alguna razón, sigo aquí", reflexionó la paciente, a quien le tomara un par de meses recuperarse por completo.

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