Habitantes de Pasto madrugan para adquirir pequeñas pipetas de gas que terminan siendo insuficientes

Las afectaciones que ha generado el bloqueo de la vía Panamericana tienen en zozobra a la capital de Nariño, pues ya se empieza a escasear este importante hidrocarburo.

Largas filas de más de tres horas son las que decenas de habitantes de Pasto, en su mayoría amas de casa, tienen que soportar para adquirir pequeños cilindros de gas que son utilizados para cocinar.

“Unos madrugan a la una o dos de la mañana. Después de las 8:00 a. m. empiezan a repartir unas pipetas chiquitas, pero no nos alcanza. Sería comprar dos veces al mes. Toca cocinar con lo que se encuentra, con leña o carbón”, dice Angie Paola Insandará, afectada.

En contexto: 

“Con vías de hecho no haré presencia en el Cauca”: Iván Duque sobre bloqueo de vía Panamericana Por su parte, en el municipio de Candelaria, Valle del Cauca, el acopio de alimentos Cavasa, recibió una gran cantidad de alimentos que hasta la semana pasada había incrementado su precio en un 50 por ciento.

“La papa que nos entra es de Nariño, el problema es el paro, pero el producto lo están entrando por las vías alternas. Se ha incrementado el gasto en un 15 por ciento”, señala vendedor de papa.

Se espera que tanto el Gobierno como las comunidades indígenas y campesinas lleguen a un acuerdo lo más pronto posible, pues las pérdidas que se presentan a diario son millonarias.