La actriz Megan Fox, uno de los referentes de belleza más reconocidos de la cultura pop de los años 2000, habló sin tapujos sobre los procedimientos estéticos a los cuales se ha sometido.
En una entrevista con el pódcast Call Her Daddy, la actriz contó su verdad sobre sus retoques estéticos. "¿Podemos hablar de cirugías plásticas? Porque siento que hay un estigma y voy a hacer esto y no voy a ganar, pero espero que libere a algunas personas", detalló.
En el episodio, Megan Fox admite que, pese a haber sido acusada múltiples veces de hacerse alguna clase de estiramiento facial e hilos tensores, nunca se ha practicado estos procedimientos.
"Los he investigado, no es por algo moral. Simplemente no creo que funcionen y tengo miedo de que interfieran cuando realmente necesite un levantamiento facial", destacó la actriz.
Admitió que tampoco se ha quitado grasa facial o corporal, puesto que por naturaleza es una persona de contextura delgada: "Me siento muy halagada cuando me acusan de haberme aplicado un levantamiento de glúteos. Si pudiera, lo haría, pero no tengo grasa".
Aunque desmintió estos procedimientos, sí aseguró haberse sometido a su primera cirugía de senos a los 21 años, algo que ha tenido que repetir en otras dos ocasiones.
“Me operé los senos entre los 21 y 22 años. Tuve que volver a operármelos cuando dejé de amamantar a mis hijos, porque no sé a dónde se fueron”, describió Megan Fox.
Así mismo, reveló que tuvo una rinoplastia hace más de 10 años, aunque muchos la acusan de habérsela hecho unas 6 o 7 veces.
Destacó que también se ha puesto rellenos y bótox, sin embargo, asegura no tener ningún otro procedimiento estético, aunque admitió estar tentada por un levantamiento de cejas.
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