Una pareja de enfermeros encontró el verdadero amor cuando, en medio de su trabajo en el hospital, debió salvar la vida de la que sería su futura hija.
Taylor y Drew Deras, una pareja de enfermeros de una unidad de cuidados intensivos neonatales de Omaha, Estados Unidos, unieron su vida de manera permanente en 2020, cuando contrajeron matrimonio.
En 2021, en medio de la pandemia por COVID-19, la pareja de enfermeros recibió en la UCI del Methodist Women's Hospital a una bebé que les cambió para siempre sus vidas.
Esta bebé prematura, quien nació a las 23 semanas y 1 día, fue atendida por Taylor desde el primer momento. "Sabía que quería ese desafío como enfermera para poder cuidarla y ver dónde irían las cosas y qué haría ella", comentó la mujer en entrevista con GMA.
La bebé, nombrada Ella, estaba luchando por sobrevivir, por lo cual debió permanecer 8 meses en la UCI. "Estuvo intubada durante varios meses seguidos. Simplemente estaba muy enferma", describió Taylor.
Pese a los malos pronósticos del personal médico, la bebé fue superando sus problemas de salud y había pasado a ser responsabilidad del estado. Los dos enfermeros se sentían tan atada a ella que decidieron convertirse en sus padres.
"La amaba como a mi paciente, y luego, una vez que nos convertimos en padres adoptivos, la amé como a mi propia hija. Cuando el juez dijo 'ahora es su hija', fue... esto es por lo que hemos estado orando y lo que hemos estado esperando. Y fue realmente como un sueño hecho realidad", explicó la madre adoptiva.
Los Deras se convirtieron oficialmente en los padres de Ella en noviembre de 2023. Ahora, a punto de cumplir 3 años, la bebé tiene una familia amorosa que la ha acompañado en sus desafíos médicos. "Nos sentimos afortunados", declaró el padre adoptivo.
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