Tras el empate a uno de la ida en Soweto, el cuadro egipcio fue superior y se hizo con la victoria en un partido que encarriló el mito del fútbol del país mediterráneo, Mohamed Aboutrika (m.55), quien aprovechó un balón suelto tras un rechace en un defensa.
El Orlando Pirates trató de reaccionar para forzar cuanto menos la prórroga, pero lejos de conseguirlo encajó la sentencia con una diana de Ahmed Abdul Zaher (m.79). La posterior expulsión del local Abdel no modificó el panorama y los sudafricanos, que dilapidaron sus opciones, no tuvieron recursos para forzar el milagro.