Según precisó la Corte Suprema peruana en su resolución, la extradición se autoriza por el delito de "asociación delictuosa y delincuencia organizada en grado de conspiración" en agravio de Estados Unidos.
Sin embargo, la resolución judicial precisó que se rechazó los cargos referidos al lavado de dinero y a fraude electrónico.
La justicia estadounidense incluyó a Burga en una nómina de 16 altos responsables y exfuncionarios de la FIFA y asociaciones nacionales latinoamericanas, entre ellos los presidentes de la Conmebol y la Concacaf, involucrados en el escándalo de corrupción que sacude desde mayo de 2015 a la organización rectora del fútbol mundial.
Burga, de 58 años, fue presidente de la FPF entre 2002 y 2014. Luego fue reemplazado por el empresario Edwin Oviedo.