"Le invité a una conversación y él me dijo que prefería hacerla por teléfono", explicó a la prensa el presidente del club Dietmar Beiersdorfer sobre la forma en la que despidió al técnico que sumaba cuatro derrotas consecutivas. Labbadia, antiguo jugador del Bayern Múnich, dirigió por última vez a su equipo ante su exequipo, al que estuvo a punto de romper su racha triunfal hasta que Joshua Kimmich encontró la portería en el minuto 88.
"Es una pena que desde el comienzo de la temporada no hayamos podido obtener los resultados necesarios", dijo Labbadia en la página de Facebook del club.
El año pasado llevó al Hamburgo a la décima plaza.