Carlos Bacca, de 26 años, fue la gran novedad en el tercer día de trabajo del equipo que entrena Unai Emery en la playa roteña de Costa Ballena, después de que llegara el pasado miércoles a Sevilla procedente de Manchester (Inglaterra), adonde su antiguo equipo, el Brujas, realiza la pretemporada.
El colombiano mostró un estado de forma óptimo "para seguir el ritmo de pretemporada del equipo", según informó el Sevilla, en la única sesión programada para este viernes por Emery, quien dio la tarde de descanso a sus jugadores tras cuatro días de concentración en Rota y una semana de trabajo desde que terminaron las vacaciones.
La sesión se centró en el trabajo con el balón, con combinaciones y salida desde atrás con apoyos en corto, la incursión de los interiores por dentro, entradas por banda y remates a portería, para finalizar con un partidillo a tres cuartos de campo y abdominales.
El técnico vasco del Sevilla alineó en un equipo al portero Beto, Coke, Cala, Nico Pareja, Fernando Navarro, Medel, Reyes, Perotti, Bacca y Negredo, y en el otro al guardameta Julián, Mode, Fazio, Maduro, Moi, Guarente, Cotán, Vitolo, Rakitic y Rusescu.
No pudo completar el entrenamiento el alemán de origen bosnio Marko Marin, quien llegó cedido por el Chelsea inglés, por una sobrecarga, por lo que se ejercitó al final con el preparador físico Sergio Domínguez, mientras que su compatriota Piotr Trochowski, que se recupera de una grave lesión, trabajó en el campo junto a los recuperadores.
La plantilla sevillista reanudará este sábado, de nuevo con un doble entrenamiento, el trabajo de preparación de la temporada, que comenzará oficialmente el 1 de agosto con la disputa de la tercera ronda de la Liga Europa.