Lo que parecía un final tranquilo para el juego entre River Plate y Boca Juniors terminó en una batalla campal entre los jugadores de ambas escuadras, que obligaron la intervención inmediata de la policía presente dentro del estadio Monumental.
A los golpes terminó el superclásico de Argentina, con Miguel Ángel Borja como protagonista y no precisamente por su intervención en los actos violentos presentados en cancha, pues, fue justamente su anotación la que desató la furia ‘Xeneize’, que reaccionó a los empujones y palabras provocadoras de los ‘millonarios’.
Una vez marcó, el delantero colombiano se fue a la esquina para festejar su anotación, sin embargo, las cámaras desviaron la atención y se centraron en la batalla campal dentro del terreno de juego, que cruzó a los jugadores de ambas escuadras.
Entre empujones, puños, patadas y agresiones, ‘millonarios’ y ‘Xeneizes’ obligaron el ingreso de suplentes, cuerpo técnico y policía argentina para controlar la situación que, según detallaron en la transmisión, se originó por la provocación de Agustín Palavecino.
Una vez concretado el gol, el argentino les celebró en la cara a defensa y guardameta de Boca, hecho que ‘calentó’ a los de ‘azul y oro’, hasta culminar en la situación presentada.
Antes de continuar el encuentro, Miguel Merentiel, Nicolás Valentini, Ezequiel Fernández fueron expulsados por parte de Boca Juniors, mientras que por parte de River Plate Agustín Palavecino, Ezequiel Centurión y Elías Gómez fueron los que vieron el cartón rojo.
Luego de dos minutos más de adición en el juego, los ‘millonarios’ se terminaron llevando los tres puntos contra los ‘Xeneizes’ en el estadio Monumental, por la jornada 15 de la Primera División del fútbol argentino.