"Nos pusimos de acuerdo con Marko Nikolic sobre su dimisión del puesto de entrenador. Es un buen entrenador, pero cometió un error y debe pagar por ello", expresó a la prensa el presidente del club Milan Mandaric.
En los días siguientes a los hechos, el club había apoyado al entrenador, estimando que su insulto no tenía una connotacion racista.
Pero, según Nikolic, la celebración hizo perder unos valiosos segundos de tiempo al Olimpia para buscar la remontada.
Marko Nikolic (36 años) pidió disculpas por una reacción "emotiva" por su parte.