Ronaldo apenas pudo participar en la final, ya que se lesionó en una rodilla en el minuto 8 y tuvo que ser sustituido un cuarto de hora después, en camilla y con lágrimas en los ojos de desesperación, que se convirtieron de alegría cuando la Seleçao ganó su primer gran título gracias a un gol de Eder en la prórroga. "No era la final que deseaba, no podía continuar, tenía demasiado dolor... pero estoy muy feliz y orgulloso", añadió.
Alrededor de 1,2 millones de portugueses residen en Francia, siendo una de las comunidades de inmigrantes más grandes del país que ha albergado la Eurocopa y que han celebrado el éxito de su selección, pese a que muchos de ellos ya son nacidos en territorio francés.