"La DFB ha tomado medidas para evitar una prescripción" que impediría una eventual demanda de indemnizaciones por parte de la federación, explicó la DFB en un comunicado difundido por la agencia de deportes SID, filial alemana de la AFP.
La DFB podría reclamar los misteriosos 6,7 millones de euros pagados a la FIFA y que podrían haber servido para garantizarse la atribución del Mundial-2016 a Alemania.
Según Niersbach, los 6,7 millones de euros fueron pagados a la FIFA en 2002 con la intermediación del patrón de Adidas entonces, Robert Louis-Dreyfus, fallecido en 2009, para asegurar esa subvención y según Beckenbauer, también sirvió para recibir una subvención de la FIFA de 170 millones de euros.
La FIFA negó estas informaciones y Beckenbauer admitió "un error", aunque no hubo "compra de votos".