"En este tipo de partidos hay que marcar goles, y si algo nos faltó en este campeonato fue contundencia y por eso me lamento", señalo Guerra, autor de uno de los dos goles en el empate ante América por el tercer puesto (2-2), que acabó del lado colombiano en los penales. "Al final quedo tranquilo por haber logrado el tercer puesto", añadió Guerra.
El campeón sudamericano esperaba alcanzar al menos la final del torneo, pero se vio sorprendido en la semifinal por el Kashima Antlers japonés, que ganó 3-0 y evitó la final soñada por los Verdolaga ante el Real Madrid.
Guerra dedicó el gol "primero a Dios, a mi esposa que me estaba pidiendo que convirtiera y bueno gracias a Dios la pude complacer con esta anotación".