La destitución del entrenador vasco, que llegó a Osasuna en febrero de 2011 en sustitución de José Antonio Camacho, se precipitó a causa de la dura derrota encajada contra el Villarreal (0-3) el pasado sábado y, sobre todo, por la pobre imagen ofrecida por los 'rojillos', que fueron silbados por los aficionados, con un sector de la grada pidiendo el cese de Mendilibar.
También se habían perdido los dos partidos anteriores, ante el Granada (1-2) en el Sadar y el Athletic de Bilbao en Anoeta (2-0), lo que ha llevado al equipo navarro a cerrar la clasificación de Primera y, a la postre, al despido del entrenador, el primero de esta temporada en Primera División.