Miguel Falla Fajardo era el joven que soñaba con ser un jugador profesional en Colombia y que hacía parte de las inferiores del América de Cali.
El juvenil fue asesinado, en las últimas horas, por robarle el celular cuando se encontraba con unas compañeras de su colegio. Miguel entregó el celular, que se lo robaron, y le dispararon.
"Apenas entregó el celular, le pegaron un tiro por la espalda cobardemente", expresó el papá.