Al término de una investigación abierta en marzo, la cámara de investigación de la Comisión de Ética solicitó una suspensión y una multa de 30.000 francos suizos (27.000 euros) contra el exdirigente alemán, que había dimitido el pasado mes de noviembre de la presidencia de la Federación alemana.
Niersbach, que aún mantiene su puesto en el consejo de la FIFA -y estuvo presente la semana pasada en el último concejo de la instancia en México- así como en el Comité Ejecutivo de la UEFA, podría declarar antes del juicio.
La investigación abierta por la Cámara de Instrucción de la Comisión Ética de la FIFA también sospecha de Helmut Sandrock y Horst Schmidt, ambos antiguos secretarios generales de la DFB, y a Theo Zwanziger, expresidente de la DFB, y al exdirector financiero de la federación alemana Stefan Hans.
Beckenbauer y Zwanziger son sospechosos de corrupción, por haber recibido "pagos indebidos y contratos para sacar ventaja de la elección del país organizador de la Copa Mundial de la FIFA 2006", precisó la Comisión Ética.
A Niersbach se le acusa no cumplir con "obligación de denunciar" una violación del código ético.
A principios de marzo, el bufete de abogados Freshfields, en un informe solicitado por la DFB, indicó que no había ninguna prueba de la compra de votos por parte de Alemania para organizar el Mundial-2006, pero que no se podía descartar dicho mecanismo de corrupción.