El delantero, de 27 años, continúa en Argentina, adonde viajó la semana pasada sin permiso del club, y no se ha presentado a las sesiones de entrenamiento en las que debería haber participado los últimos días ni a la reunión que convocó el lunes el City para tratar su caso.
"La situación continúa igual y, cuanto más tiempo esté fuera el jugador, va a ser más imposible que se reconcilien", señaló Taylor a la cadena británica Sky News.
El portavoz indicó que el jugador está en Argentina con su familia y desmintió que disponga de un certificado médico según el cual no puede jugar ni entrenarse, como había trascendido a los medios esta semana.
El culebrón entre el internacional argentino y el Manchester City comenzó este verano, cuando el jugador declaró en repetidas ocasiones que quería abandonar Manchester.
Las negociaciones con clubes como el Inter de Milán y el brasileño Corinthians, en el que ya jugó el "Apache", no fructificaron, por lo que Tévez se mantuvo a las órdenes del técnico Roberto Mancini.
La situación se agravó hace un mes y medio, cuando el delantero se negó a entrar al terreno de juego durante un partido de Liga de Campeones contra el Bayern de Múnich.
A raíz de ese incidente, el argentino volvió a ser convocado con el equipo y pagó una multa de dos semanas sin sueldo, unas 500.000 libras (575.000 euros).