Bellini, que también fue campeón con Brasil en el Mundial de 1962 en Chile, era uno de los grandes ídolos deportivos en el país que albergará el Mundial de este año por haber levantado el primero de los cinco títulos mundiales conquistados por el país.
El exfutbolista fue inmortalizado en vida con una estatua en una de las puertas del estadio Maracaná, de Río de Janeiro.
Tras las nuevas complicaciones y el agravamiento de su estado de salud, Bellini fue ingresado en una Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Nueve de Julio de la ciudad de Sao Paulo, en donde terminó muriendo de falla múltiple de órganos e insuficiencia respiratoria.
Sus parientes más próximos informaron de que el exfutbolista será enterrado el viernes, en Itapira, ciudad en el interior del estado de Sao Paulo en que nació y en el que está sepultada toda su familia.
Bellini es uno de los grandes ídolos del Vasco da Gama, club de Río de Janeiro con el que actuó por nueve años y con el que conquistó tres títulos del Campeonato Carioca.