Pep Guardiola sabe que para ser recordado en el Manchester City, depende de la Champions League

Pep Guardiola sabe que su rendimiento en la Champions League es lo que determinará su imagen en la memoria de la hinchada del Manchester City. "Estoy seguro que seré juzgado por esta competición" afirmó.

Pep Guardiola, técnico del Manchester CIty
Foto: AFP

Pep Guardiola, técnico del Manchester City, aseguró que su tiempo en el conjunto inglés será juzgado en base a sus resultados en la Champions League.

Desde su llegada en 2016, Guardiola no ha faltado a la cita con los cuartos de final desde su primera temporada, cuando el Mónaco les eliminó en octavos. Desde entonces acumulan cinco apariciones seguidas en cuartos y este martes pueden sumar una más si vencen al RB Leipzig.

"Sí", respondió Guardiola al ser preguntado si su etapa en Mánchester será juzgada por sus éxitos en la Champions, donde su tope es la final de 2021, perdida ante el Chelsea, y las semifinales del año pasado, cuando les eliminó el Real Madrid.

"No quiero decir que esté de acuerdo de ello, pero estoy seguro que seré juzgado por esta competición", añadió el técnico español, que con el Manchester City ha ganado más de una decena de títulos, incluyendo cuatro de las últimas cinco Premier League.

Esta campaña, el City sigue vivo en Premier, a cinco puntos del Arsenal, en la FA Cup, donde están en cuartos, y en la Champions.

"Es muy importante seguir en estas competiciones, porque te permiten seguir competitivos en los dos últimos meses de la temporada. Seguir intentando acercarnos al Arsenal, seguir en Europa... Eso sería bueno", afirmó Guardiola.

La última vez que Pep Guardiola fue campeón de la Champions League fue con el Barcelona en 2008 en aquella temporada que lo ganaron todo: Liga de España, Copa del Rey, Champions League, Supercopa de España, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes. Ahora, en la dirección del Manchester City, lo más cerca que estuvo fue en la Champions League de la temporada 2020-2021 cuando los 'citizens' se enfrentaron contra el Chelsea. En esa ocasión, se le escapó el título gracias a un gol de Kai Havertz que dejó sentenciada la final.

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