"Me gustaría que este campeonato fuese limpio, limpio, pero para mí, según mi lectura, es un campeonato manchado. Pasa a ser sucio, sucio, sucio, después del partido inadmisible de hace dos jornadas (Benfica-Sporting)", acusó el entrenador del Porto, que sustituyó a André Villas-Boas hace dos temporadas.
Pereira aludió a lo ocurrido en el derbi de Lisboa entre Benfica y Sporting, donde supuestamente hubo varias decisiones arbitrales que favorecieron al líder.
A pesar de que Benfica aún debe de visitar el estadio Do Dragao del Oporto en la penúltima jornada, el técnico blanquiazul insistió en que ya no es posible luchar por el entorchado liguero "hasta la última jornada".
Para revalidar su título de campeón liguero, el Porto necesita ganar los nueves puntos que restan, incluyendo el enfrentamiento directo con los lisboetas, y esperar que Benfica tropiece ante Estoril o Moreirense, ambos encuentros a disputarse en el Estadio de La Luz.