El control judicial le había sido levantado en febrero a Benzema por decisión de la jueza de instrucción.
Pero ante el recurso presentado por la fiscalía, la cámara que instruye el caso en Versalles, a las afueras de París, deberá reexaminar la cuestión y decidir el 11 de marzo si reinstaura o no ese control.
El caso se centra en un vídeo íntimo de Valbuena grabado por tres hombres, más o menos cercanos a los futbolistas, y que supuestamente usaron para intentar extorsionar al jugador del Olympique de Lyon.
Karim Zenati, amigo de infancia de Benzema y uno de los presuntos chantajistas, contactó con el jugador del Real Madrid, que supuestamente debía intentar convencer a Valbuena para que pagara.
Benzema habló del vídeo con Valbuena el 6 de octubre en el centro de entrenamiento de la selección francesa en Clairefontaine, según él, de manera amistosa, mientras que la acusación afirma que Benzema intentó presionar y amenazó a su compañero.
Finalmente, Benzema fue imputado el 5 de noviembre por "complicidad de tentativa de chantaje" y "participación en una asociación de malhechores", delitos pasibles con hasta cinco años de cárcel.