A tenor de las palabras de Bielsa tras la final de la Copa del Rey hace ocho días y las del propio presidente, Josu Urrutia, emplazando a una resolución en un sentido u otro al término de esta semana parecía que el viernes era el día 'D' para la resolución del caso, pero la noticia de la jornada estuvo en que no hubo noticia.
Fue un día de espera en vano en la que la falta de una comunicación oficial hizo que se dispararan los rumores, entre ellos que tanto el argentino como sus ayudantes habían prolongado su permiso de residencia en España, lo que hacía prever un inminente 'sí' de Bielsa que finalmente no se produjo.
Al parecer, ambas partes continúan manteniendo reuniones, la última de ellas este sábado mismo en Lezama, para tratar de resolver algunos flecos que afectarían a varios ámbitos, tanto de la parcela deportiva como incluso de mejora de las infraestructuras de Lezama.
Lo cierto es que la espera, larga, aunque aún dentro del plazo que tanto Bielsa como el Athletic se dieron para resolverla, está comenzando a incomodar a una parte de la afición rojiblanca a la que, después de la ilusionante temporada recién finalizada, se sentiría muy decepcionada si el argentino opta por dar un 'no' a la propuesta rojiblanca.