"Estoy listo para el partido. Tengo unas enormes ganas de jugar y debo jugar", dijo el francés, como un mensaje al entrenador Pep Guardiola, que le hizo comenzar en el banquillo en la derrota del partido de ida (1-0), el pasado miércoles en Madrid.
De regreso tras un año 2015 casi en blanco, Ribéry jugó 18 partidos esta temporada, entre ellos los seis últimos de Liga de Campeones.
Ribery lleva dos goles y cinco asistencias en la Bundesliga.